Desde hace unas semanas que llevo notando a
Sherlock diferente, se comporta de una manera que yo nunca lo había visto, no
quiere saber nada a cerca de su "trabajo" lo cual me parece muy
raro ya que es en lo que más tiempo dedica. Este comportamiento empezó a
cambiar desde que estaba investigando un caso que nunca me llego a contar, un
caso del que he tenido que investigar por mi propia parte.
Esta mañana me he despertado y como siempre
acostumbro desayuno leyendo el periódico y ojeando en las noticias más
recientes me he encontrado con un artículo que me ha llamado la atención, el
brutal asesinato de un joven cerca de Baker Street, la policía explicaba que el
cuerpo se encontraba irreconocible, y no se sabe cuál es el motivo de su
muerte. Después de leer la noticia al completo me quedé impresionado, nunca
habíamos investigado un caso con estas características, me levanté del sofá y
me acerqué a Sherlock, llevaba un mes más o menos raro pero aún así le hablé
sobre el artículo del periódico que había leído y no mostró mucho interés, ya
me había acostumbrado a esa situación.
Hacía una buena mañana y se me ocurrió darme un
paseo por la zona y de paso acercarme al lugar del asesinato. Cuando llegué me
encontré para mi sorpresa que no había ningún policía, raro porque el crimen se
había cometido hace muy poco, el lugar era la travesía de Baker Street, en la
misma manzana donde vivíamos, se me ocurrió investigar por la zona pero no
encontré nada.
Han pasado los días y no le he dado más
importancia y he seguido con mi vida normal pero Sherlock cada vez va a peor,
no sé qué hacer, no entiendo nada, mi mejor amigo tiene un problema pero
no quiere decírmelo.
Ha pasado una semana y me he puesto a curiosear
el periódico otra vez y me he encontrado con una noticia semejante a la que vi
la semana pasada, estaba claro que el asesino era el mismo por todo lo que
relacionaba este crimen con el otro, pero en este caso no era en la misma
calle, pero seguía siendo por la zona donde vivíamos. A simple vista las dos
personas asesinadas no tenían nada en común ni tampoco había un móvil para que
el asesino quisiera matarlos, lo único que se podía observar en estas dos
personas era que pertenecían a los bajos fondos de Londres.
Esta misma mañana Lestrade se ha acercado a casa
preguntando por Sherlock, yo le he dicho que no se encontraba bien pero
ha insistido en que necesitaba su ayuda, entonces yo le he preguntado si era
por los asesinatos de Baker Street y él me ha contestado que sí, que necesitaba
su ayuda, yo me he ofrecido a colaborar en la resolución del caso ya que
Sherlock no estaba en condiciones. Hemos llegado a la comisaria y hemos entrado
en su despacho, ya allí dentro Lestrade me explica que hay una sustancia que está
provocando que la persona que lo consume entra en un estado de rabia como pasa
en los perros, yo me quedo pensando y al cabo de un rato le pregunto qué
relación tenia con el caso, Lestrade me explica que las heridas que había en
las víctimas no eran hechas con un arma blanca pero eran demasiado brutales
para haber sido hechas cuerpo a cuerpo.
Al salir de la comisaria después de haber hablado
con Lestrade me quedé desconcertado, una droga que provocaba un estado de
rabia, dos asesinatos hechos por la misma persona y al parecer después de haber
consumido esa sustancia y para mí lo más preocupante era el comportamiento de
Sherlock, inevitablemente empecé a sospechar de él. Después de pasar un
día fuera de casa llegué sobre las 20:00 de la noche, Sherlock no estaba y me
puse a investigar, entré en su habitación y revisé sus cajones en busca de
algo, a simple vista no había nada raro, miré en su ropa y para mi sorpresa en
uno de sus pantalones me encontré mi cartera y estaba vacía, me imaginé lo peor
y por eso salí en su búsqueda. Ya en la calle me dirigí a donde sabía que podía
encontrar a Sherlock, y cuando llegué me lo encontré tirado en el suelo
inconsciente y rápidamente llamé a una ambulancia.
Después de estar en observación en el hospital el
médico me dijo que estaba estable pero que había sufrido una intoxicación, la
droga que había consumido estaba mezclada con medicamentos antidepresivos y en
su cuerpo también habían encontrado una substancia que yo había escuchado
antes. Entré en la habitación, Sherlock estaba tumbado y me acerqué a él,
estaba consciente y le hablé de lo que había pasado, el no se acordaba de nada.
Llegamos a casa y estuve explicándole lo que
había sucedido y entonces fue cuando me lo contó todo, hace aproximadamente un
mes que Sherlock se comportaba de una manera inusual y es que estaba
investigando una red de traficantes que se había instalado en Londres y que
estaba provocando muchas muertes, sobre todo en los jóvenes, porque la droga
estaba cortada. Me quedé pensando y aún había una cosa que faltaba por
resolver, ¿Quién había asesinado a esos dos jóvenes cerca de Baker Street?, le
pregunté pero Sherlock me dijo que desconocía quien había sido y que él no era.
El problema aún no había acabado porque no se había resuelto el caso de la red
de traficantes ni el de los
asesinatos.
Después del incidente de Sherlock todo volvió a
la normalidad, pero yo me quedé con una incógnita sin resolver, ¿Quién era el
asesino?, durante estas semanas he estado mirando el periódico en busca de otro
asesinato con las mismas características pero casualmente ya no encontré nada,
me quedé con la duda de si había sido Sherlock pero quise confiar en él y
olvidar el asunto al fin y al cabo era mi mejor amigo y aunque hubiese sido él
no lo habría delatado.
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